A veces unas simples lentejas pueden convertirse en un
manjar. Después de días de hambre porque había fallado la intendencia, Domingo
Sánchez, exiliado político español enrolado en el ejército francés y destinado
en Villerupt en el departamento de Meurthe y Moselle, en la región de la
Lorena, se sentó a degustar un plato de lentejas. Corría el año 1944. El final
de la Segunda Guerra Mundial aún no se vislumbraba. Si bien es cierto que las
lentejas contienen hierro, los soldados alemanes que tenían enfrente no
deseaban lentejas - o quizás, sí - lo que querían era conquistar las minas de
hierro de la región, vitales para mantener su maquinaria de guerra.
En las largas noches en vela, Domingo grabó en su vaso,
cantimplora y plato de aluminio la fecha (10 de mai 1944), el nombre del pueblo
(Thil, en el cantón de Villerupt), su perfil y el de una campesina soviética
con la que soñaba.
Por una de aquellas casualidades de la vida han llegado a
nuestras manos la fiambrera y demás utensilios que Domingo Sánchez utilizó
durante la Segunda Guerra Mundial. Sirva esta receta de recuerdo para cuantos
lucharon por frenar el nazismo en Europa.
RECETA |
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INGREDIENTES (para 4 personas) |
- 300 g de lentejas pardina.
- 200 g de calabaza.
- 1 puerro.
- 1 pimiento verde.
- Una cebolla.
- 1 diente de ajo.
- Una hoja de laurel.
- Pimentón.
- 50 g de aceite.
- Sal.
- Agua.
PREPARACIÓN |
- Lavar y escurrir las lentejas.
- Ponerlas en una cazuela junto con el puerro, el pimiento verde cortado en trocitos, la sal, el ajo y el laurel y cubrir de agua dos dedos por encima del nivel de las lentejas, poner a fuego lento y dejar que hiervan durante unos quince minutos.
- Añadir la calabaza cortada a dados y dejar hervir unos veinte minutos más.
- Mientras tanto, poner una sartén al fuego con el aceite y sofreír la cebolla cortada a trocitos sin que se llegue a dorar, retirar del fuego y añadir una cucharada de pimentón.
- Añadirlo a la cazuela y esperar hasta que estén tiernas.
- Añadir agua si fuera necesario
uhhh que ricor, las lentejas uno de mis platos favoritos...feliz comienzo de semana!!
ResponderEliminarSon mis legumbres favoritas, me encantan sobre todo con verduras. Bs.
ResponderEliminarJulia yh sus recetas.
Me has dejado alucinada con la historia! Como han llegado a tus manos?
ResponderEliminarY sobre las lentejas, a mi siempre me han gustado mucho pero nunca las he probado con calabaza, asi que la proxima vez las hare a tu manera, gracias!
La receta en si me parece muy sabrosa. Aun tengo calabaza por el congelador y probaré, aunque sin duda no me va a saber lo mismo que en esa fiambrera con tanta historia.
ResponderEliminarFeliz semana
Ostres...quina història, quin homenatge i quin gran plat! Petons!
ResponderEliminarese toque de calabaza le debe de dar un toque dulzor impresionante!!! me gusta la idea!!!
ResponderEliminarLos platos únicos, contundentes, de cuchara, perduran en el tiempo, por encima de mil batallas los seguimos consumiendo. Muy buenas estas lentejas, yo también las hago con verdura, aunque a veces también cuelo un par de chorizos en la olla.
ResponderEliminarUn beso.
Que aspeto sedutorm ficou muito apetitoso.
ResponderEliminarBjs
¡¡Así las lentejas tiene que estar buenísimas!! Muchas gracias por la receta.
ResponderEliminarAprovecho también a que visites mi blog www.sdesabor.blogspot.com en el que hoy he realizado un post sobre arroz bomba y me encantaría que pudieras dar alguna idea de receta a mis usuarios en el que pudiera aplicar este arroz. Por supuesto puedes firmar con tu blog para que puedan conocer todas tus recetas.
Un abrazo
Me ha encantado la historia! ¡qué sensación más grande tiene que ser tener esos utensilios de cocina!
ResponderEliminarUn beso.
Gosto muito de lentilhas e assim devem ter ficado uma delicia
ResponderEliminarVou levar a receita pois quero muito provar
Bj
Qué buena pinta, siempre las hago con carne y así es una alternativa buenísima.
ResponderEliminarbesos
Para mi gusto uno de los mejores platos de cuchara
ResponderEliminarBss
Que ricas!!!!!!!!! tengo que probarlas con la calabaza seguro que le da un toque especial. Besotes
ResponderEliminarQue sugestão reconfortante e bem deliciosa.
ResponderEliminarAdoro lentilhas e com este molho estão mesmo bem apetitosas, uma maravilha de sugestão.
beijinhos
En serio que tienes esos utensilios!!??? Qué fuerte!!! Qué curiosa la historia y qué gran plato!! Me gusta mucho la historia y la composición de las fotos.
ResponderEliminarLas lentejas son un manjar de monarcas, para los vegetarianos son una fuente necesaria de proteínas y de hierro claro.
Tiene una pintaza increíble, gracias por compartir la receta! :)
Un abrazo
Curiosa historia y bonito recuerdo!
ResponderEliminarUn plato espectacular, yo creo que lo que querían los alemanes eran estas lentejas, y no el hierro de las minas!
Besos!
¡Me encantan las lentejas y me encanta la calabaza así que voy a hacer vuestra receta! ¡una pinta estupenda!
ResponderEliminarMuy ricas las lentejas, las probaré con calabaza.
ResponderEliminarGracias por tu visita.
Qué rico, me encanta, la presentación es espectacular, y el post muy instructivo, Una receta deliciosa! Besitos
ResponderEliminarCarlos-Chocoboss
Irresistibles y absolutamente deliciosas, que ganas de probar esta versión!!!
ResponderEliminarMil besos.
Hola Felicitaciones por tu blog y por esta receta, me encanta las lentejas. A partir de hoy voy a ser tus seguidores.
ResponderEliminarAsi me gustan a mi las lentejas solo con verduras, cuando no tengo calabaza le pongo zanahoria. Receta sana y muy saludable.
ResponderEliminarSaludos
Todas pero todas son recetas extraordinarias. gustosas, nutritivas. Mejor no se puede pedir. Buena Pascua.
ResponderEliminarTodas vuestras recetas son estupendas y tan bien contadas que entran ganas de ponerte en la cocina. Gracias por darnos tantas ideas sencillas. Felicidades ¡¡¡¡¡
ResponderEliminarQué linda historia!
ResponderEliminarLa receta la estoy realizando en éste mismo momento. Ya estaba harto de hacer siempre las lentejas con zanahoria.