GALLETAS DE AVELLANA

Hoy vamos a romper una lanza a favor de uno de los frutos secos que ha sufrido más en los últimos años. Nos referimos a la avellana, que ha tenido que soportar el embate de la importación de avellana de Turquía, el principal productor de este fruto seco con 660 mil toneladas en 2012. En las comarcas de Tarragona, concretamente en el Baix Camp, la avellana se explota desde el siglo XIII aunque tuvo su auge a finales del siglo XIX, a raíz de la plaga de la filoxera que acabó con las vides de buena parte del país. Hasta este momento, Reus –junto con París y Londres- era una de las tres ciudades que marcaban el precio del aguardiente a nivel mundial. La filoxera obligó a reinventarse. Hubo que arrancar cepas y se plantaron avellanos. Una buena solución para capear la crisis. Ahora el enemigo del sector de la avellana es la importación, la globalización del mercado. Al margen de historias, hay que apuntar que como todos los frutos secos la avellana es imprescindible para prevenir el colesterol, la hipertensión y demás problemas cardiovasculares. Estas galletas pueden contribuir a ello.

RECETA

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	INGREDIENTES

• 150 g de avellanas tostadas y molidas
• 300 g de harina
• 2 huevos medianos
• 125 g de mantequilla a temperatura ambiente cortada en dados
• 100 g de azúcar
• Media cucharadita de las de café de  canela
• Media cucharadita de anises
• Una pizca de sal

   INGREDIENTES PARA LA DECORACIÓN

• 1 cucharada de azúcar
• Media cucharadita de canela
• Una clara de huevo
• 1 avellana por encima de cada galleta

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	PREPARACIÓN

1. Triturar las avellanas a golpe de turbo si lo hacéis con Thermomix o en espacios cortos para que no se apelmace y nos quede una masa aceitosa.
2. Machacar los anises en un mortero hasta conseguir un polvo.
3. Poner la harina sobre una superficie de trabajo y hacer un volcán amplio, en el medio poner las avellanas molidas y el resto de ingredientes incluido el polvo de los anises.
4. Con los dedos ir mezclado los ingredientes de dentro del círculo y finalmente ir agregando la harina de los laterales hasta conseguir una masa donde todo esté bien mezclado.
5. Hacer una bola con la masa, tapar con film y dejar reposar una hora en la nevera, se puede hacer de un día para otro sin ningún problema.
6. A la hora de hacer las galletas estira la masa entre dos papeles de horno hasta conseguir un grosor de medio centímetro.
7. Formar las galletas con los moldes elegidos e ir dejándolas sobre una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado, poner una avellana en el centro de cada galleta, pintar con clara de huevo ligeramente batida y espolvorear un poquito de azúcar y canela una vez mezclado.
8. Si dejamos enfriar un ratito en la nevera antes de hornear, quedan las galletas mejor formadas.
9. Hornear entre 17 y 20 minutos en horno previamente calentado a 180 grados, hasta que veamos que se doran los bordes.
10. Dejar enfriar sobre una rejilla.
11. Una vez frías meter en una caja de latón hermética.

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