
Llego a casa aturdida por tantas luces de colores, tanta
música festivo-navideña, tantos regalos, tantos deseos de felicidad de gente
que no conoces, tantos papásnoeles de pacotilla que te sobresaltan con su
estridente “Ho, ho, hoooo”. Me encierro en la cocina pero caigo en la trampa:
he de preparar un aperitivo navideño pero sólo tengo en casa cuatro cosas y no
pienso volver a pisar la calle. Es cuestión de ingeniarse algo apetitoso, que
no suponga mucho trabajo y que pueda gustar a toda la familia. Manos a la obra.
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 | INGREDIENTES (para 12 tartaletas) |
- Un paquete de empanadillas
- Una cebolla grande
- Una manzana golden
- Un confit de pato
- Mantequilla
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
- Uvas para decorar
PREPARACIÓN
 | PREPARACIÓN |
- Cortar la cebolla en brunoise. Freírla en una sartén con
aceite, hasta que esté blanda pero sin que se llegue a dorar y reservar.
- Pelar y cortar la manzana en daditos pequeños. Saltear en
una sartén con mantequilla hasta que la manzana esté blanda, añadir a la
cebolla.
- Poner el confit de pato en el microondas un minuto para que
suelte su grasa y poderlo limpiar quitando la piel y los huesos. Cortar en
trocitos y agregar a la preparación anterior. Mezclar todo, añadiendo dos
cucharadas de la grasa del confit.
- Poner la base de las empanadillas en un molde metálico para
magdalenas y rellenar con la farsa anterior.
- Introducir en el horno precalentado a 180º entre 13 y 15
minutos hasta que la base quede dorada y crujiente.
- Dejar reposar unos minutos sobre una rejilla y decorar, en
este caso, con un grano de uva.
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