jueves, 28 de enero de 2016

PASTAS DE TÉ


Siempre que pienso en el té me viene la imagen de un par de damas inglesas entradas en años, llevándose a los labios una humeante taza de porcelana y pellizcando con manos delicadas unas pastas mientras en el reloj del salón dan las cinco en punto de la tarde. Dicho de otra manera, veo todos los tópicos que películas y libros nos han hecho creer en torno al consumo del té. No niego que pueda existir esta escena de las damas, pero la mayoría de bebedores de té no responden a estas características. ¿Sabéis por qué? Pues porque después del agua, la infusión de hojas de té es la segunda bebida más consumida en el mundo y es inimaginable que media humanidad beba té a las cinco de la tarde en tacitas de porcelana. El té tiene su origen en China, donde comenzó a utilizarse por sus propiedades medicinales. Después de extenderse su consumo por Oriente, en el siglo XVII llegó a Europa de la mano de comerciantes holandeses y portugueses, alcanzando gran prestigio entre las clases adineradas. Lo que nunca he sabido es por qué el té suele ir acompañado de unas riquísimas pastas de mantequilla. Quizás sea para compensar su ligero sabor amargo. Y es que como dice un refrán: “El primer té es amargo como la vida. El segundo es dulce como el amor. El tercero es suave como la muerte”. 


RECETA

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INGREDIENTES (para 30 pastas)
  • 200 g de harina.
  • 130 g de mantequilla a temperatura ambiente.
  • 80 g de azúcar glas.
  • 80 g de leche.
  • 1 g de sal.
  • 1 g de vainilla.
  • La ralladura de una naranja.
  • Chocolate de cobertura para adornarlas.
  • Confites de colores.

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PREPARACIÓN
  1. Batir la mantequilla, el azúcar, la sal, la ralladura de naranja y la vainilla hasta que queden todos los ingredientes bien mezclados; se puede hacer con una espátula o con unas varillas eléctricas.
  2. Incorporar la leche tibia poco a poco.
  3. Tamizar la harina y mezclarla a velocidad lenta o con una espátula. No conviene trabajar mucho la masa.
  4. Poner papel de horno en una bandeja, pasar la masa a una manga pastelera con boquilla rizada y formar las pastas.
  5. Precalentar el horno a 180º y hornear 10 minutos aproximadamente, hasta que estén doradas.
  6. Poner a enfriar sobre  una rejilla y una vez frías adornar con chocolate de cobertura. 




11 comentarios:

  1. Te han quedado de lujo, un par de ellas con un té y un desayuno perfecto. Bss

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  2. tiene una pinta estupenda ,con té o café una delicia
    bs

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  3. Qué fotos más chulas! Super bonitas! Y qué decir de las pastas! Ideales, apetecibles a más no poder! Junto aun buen té...como disfrutaría de ellas! Besos

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  4. ¡Hacedme un hueco en esa merienda de té con patas!
    Pues fíjate, que llevo unos días que cuando me tomo mi té me falta algo, y creo que eran estas pastas, así que tendré que hacerlas... :-)
    ¡Un besote!

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  5. Pues me pasa lo mismo, la hora del té es definitivamente una escena de Dawntown Abby.

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  6. Qué bonitas, te han quedado perfectas, parecen compradas!!! y ricas deben estar un rato!

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  7. A mí de todos los tés, el que más me fusta es el verde con hierbabuena. Esta pastas se ven deliciosas y estupendas para disfrutarlas con té o con un buen café. Un beso guapa

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  8. Mmmmm queu buenas Ana!! Se me hace la boca agua pero es que las fotos me han dejado maravillada!! Un beso guapa!

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  9. A casa són mooooolt d'infusions...en prendrien tot el dia...i si els hi faig aquestes pastetes ja seria un no parar!!! Precioses...els llibres roses em semblen genials!!

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  10. Qué ricas!!!! me encantan las pastas. Las hago mucho para regalar y estas tienen que estar de lujo. Las dejo en pendientes
    Un abrazo

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  11. Yo soy bebedora de té y adicta a él. I si os digo que soy muy maniatica en cuanto al tipo de taza, ha de ser de bordes muy finos y de porcelana. No soy nada maniatica en cuanto a la hora de tomármelo, me va bien a todas horas y si me lo sirvo con unas pastitas como éstas, mejor que mejor. Una maravilla las fotos.
    Besos

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